Para “cortar” un resfriado, tanto en verano como en invierno, haz lo
siguiente:
En un cazo pon:
- medio limón (con la pulpa) cortado en 4 trozos
- 2 naranjas gordas (o bien 4 medianas) cordadas en 8 trozos (también con la
pulpa)
- un litro y medio de agua.
Hazlo hervir alrededor de una hora, a fuego lento, hasta que mengüe la
mitad de agua.
Luego debes colarlo, prensando un poco las naranjas y el limón para que
escurran el líquido que todavía contienen.
Sírvete en un vaso un poco de esta decocción, añade el resto de agua y ponle
miel al gusto. Si te lo tomas caliente, mucho mejor.
Deja enfriar el resto del líquido que haya sobrado y, sin agua ni miel,
llena una cubitera y congélalo. Así siempre tendrás este preparado listo para
usar: sólo tendrás que poner dos o tres cubitos en un vaso, añadir agua, calentarlo y poner luego la miel.
Si quieres obtener más cantidad, solamente debes doblar las dosis de todo.
Un buen remedio casero,tiene que estar bueno con la miel.
ResponderEliminarBesos
Cocinando con Montse
Sí que es un buen remedio casero, un poquito fuerte de sabor, pero con el agua se rebaja. En casa lo usamos hace años y, como nos lo recomendó nuestra amiga Luci, lo llamamos "el remedio de Luci".
ResponderEliminar