Ahora es el mejor momento para efectuar la poda de los rosales. De hecho, se realiza dos veces al año: una hacia Septiembre y la otra en Febrero, que debe ser muy estricta.
La debes realizar pensando en la forma que quieres para tu rosal, pero primero empieza por cortar los tallos muertos o estropeados, y también los que se entrecrucen, así tendrás una idea más clara de tu planta y te habrás deshecho de todo lo que no sirve.
Los cortes deben ser limpios e inclinados. Generalmente se recomienda la estructura de V para la poda de los rosales.
Ahora párate, mira el rosal, e imagina qué forma quieres que tenga: poda en consecuencia.
Además, durante todo el año, es muy importante cortar las rosas marchitas. ¿Hasta donde? Hasta abajo del tallo, porque si no lo haces así la planta pierde energía en lugar de emplearla en nuevas rosas.
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